jueves, 6 de noviembre de 2008

Asturias, enclave perfecto para los negocios



El actual periodo de desaceleración no ensombrece el crecimiento eco­nómico de Asturias registrado en los últimos años. El establecimiento de nuevas áreas industriales, la consi­derable mejora de las infraestructu­ras y de las comunicaciones y el au­mento en la celebración de congre­sos y acontecimientos de corte em­presarial ha impulsado el dinamismo del entorno de los negocios en la co­munidad, fundamentalmente en la capital asturiana.
La situación geoestratégica de la región y el interés que ha suscitado entre firmas inversoras de nivel na­cional e internacional también han contribuido a que las empresas que gestionan los centros de negocios fijen su atención en el mercado asturiano, lo que justifica el incremento en el número de este tipo de espa­cios en la comunidad.
Oviedo y Gijón son las ciudades que más se han visto beneficiadas por el auge de los centros de negocios. La mayoría de ellos suelen estar ubicados en las zonas más céntricas de la ciudad, que gozan de perfectos accesos y comunicaciones, y que se enmarcan en una activa zona de servicios.

A tener en cuenta

La empresa o profesional interesado en contratar los servicios de un cen­tro de negocios debe conocer, en pri­mer lugar, cuáles son las necesida­des que plantea su negocio. No necesitará lo mismo un inglés que busca una oficina de representación en Asturias que un empresario asturiano que necesita organizar unas jornadas.
Una vez sabiendo qué servicios se requieren, es preciso comparar pre­cios y calidades entre la amplia ofer­ta existente en el mercado.
La ubicación del centro y cómo es­té conectado con la ciudad y las prin­cipales vías de comunicación serán factores a tener en cuenta.

Cuarenta años al servicio de la empresa

España ha reconocido la categoría empresarial de los centros de negocios


Toda actividad económica precisa estar normalizada para contar con una serie de ventajas y beneficios legislativos y jurídicos que ayuden a propiciar el crecimiento del sector. Hoy en día, los centros de negocios ya disponen de ese reconocimiento empresarial.

El sector de los centros de negocios surgió a comienzos de la década de los setenta en Europa y Estados Uni­dos ante las necesidades de encon­trar mayor flexibilidad en los alqui­leres y en los espacios que deman­daban las empresas. En España, es­ta fórmula se introdujo hace diez años y hoy en día es una actividad económica muy extendida. Tanto es así que, recientemente, el Instituto Nacional de Estadística ha clasificado la actividad de los cen­tros de negocios, que a partir del pró­ximo 1 de enero pasarán a formar parte de la categoría de servicios ad­ministrativos combinados. Este re­conocimiento supone un hito impor­tante para el sector, ya que representa un paso adelante en la consolida­ción de este ejercicio económico, tanto a nivel nacional como mundial. España ha sido pionera en admitir la entidad empresarial de estos espa­cios multiservicios y actuará como motor para que esta validación se extienda también a otros países eu­ropeos.
El reconocimiento legal de esta actividad responde a la necesidad de definir el sector de los centros de ne­gocios, que ha experimentado un amplio auge en las últimas décadas, con tasas de crecimiento superiores al 15% anual y que se refleja en la apertura de más centros, con más servicios y de mayor dimensión en España.

Un servicio integral con evidentes ventajas


Los centros de negocios ponen a dis­posición del profesional o de la em­presa las instalaciones y los servi­cios que necesitan para llevar a ca­bo su negocio. Si a esta característi­ca sumamos ia minimización de cos­tes, contar con uno de estos espa­cios ofrece, sin duda, múltiples ven­tajas a sus usuarios.
No hay que confundir lo que impli­ca domiciliar la sociedad empresa­rial en un centro de negocios con lo que supone alquilar una oficina. En este último caso, el servicio se limi­ta al arrendamiento de despachos y, excepcionalmente, a la atención y recepción de llamadas telefónicas. Sin embargo, un centro de negocios está dirigido por organizaciones es­pecializadas que ofrecen un servicio integral a la empresa, además de instalaciones con un alto nivel de equipamiento. Podría decirse que un centro de negocios es una "oficina inteligente".
Básicamente, estas fórmulas em­presariales ofrecen cinco líneas de productos, que abarcan desde el al­quiler de un despacho equipado a la domiciliación de una sociedad, por la que no hace faltar estar presente en el centro para recibir llamadas, correspondencia y visitas; pasando por los servicios de secretariado; la contratación de salas de reuniones, conferencias y formación; y una oferta de calidad en telecomunica­ciones.
Entre las prestaciones que ofre­cen, destaca un completo servicio administrativo y de secretariado. Es crucial también el apoyo en las ges­tiones logísticas, ya sea en la aten­ción de servicios de mensajería, al­quiler de coches o servicios de catering, como en la contratación de in­térpretes o traductores. Igualmente, el personal del centro de negocios suele estar capacitado para ofrecer un asesoramiento jurídico y comer­cial a la empresa en función de sus requerimientos. El centro dispone los equipos in­formáticos necesarios para la acti­vidad profesional cotidiana como las impresoras o el escáner. Del mismo modo, garantiza el ac­ceso a Internet y la configuración del correo elec­trónico, así como la disponibilidad de teléfono, fax, y fotocopiadora.
Los centros de negocio se usan a menudo como oficina de represen­tación en el extranjero. De este mo­do, no es necesario que la empresa esté implantada físicamente en otro país para desarrollar sus actividades internacionales.

Principales ventajas

El factor económico es el que habitualmente determina que una compañía opte por esta fórmula empre­sarial. La reducción de costes que plantea un centro de negocios com­parado con la inversión que supone establecerse por cuenta propia es notable en las instalaciones y en el equipa­miento. El abara­tamiento de cos­tes no se percibe exclusivamente al inicio, sino que es una constan­te en el manteni­miento de la ac­tividad empresa­rial. Así, los gas­tos mensuales son fijos, evitando ex­tras como el mobiliario, los equipos informáticos, el sueldo del personal, el teléfono, la luz, la limpieza diaria, el aire acondicionado, el sistema de seguridad, las obras del local, etc.
Desde Centro de Negocios Caveda nos es posible señalar que por unos 60 euros al mes se puede mantener una domiciliación, sin necesidad de contar con un despacho. Esto constituye una buena alternativa al cierre de una empresa, pues por poco dinero se puede seguir conservando una re­presentación, lo cual contribuye a mantener la imagen de la compañía en tiempos difíciles.
No obstante, contar con los servi­cios de estos espacios incluye otras interesantes ventajas. Una de ellas es la inmediatez, puesto que el em­presario puede llegar y empezar a trabajar en el momento gracias a la dotación de equipamientos y perso­nal de los centros de negocios. Ade­más, puede despreocuparse de las cuestiones de intendencia diaria, ta­les como los asuntos administrati­vos, de tesorería cotidiana, de per­sonal o logísticos, entre otros.
Todo centro de negocios se define por contar con personal competen­te y experimentado, que demostra­rán una dedicación exclusiva y per­manente a la actividad profesional del cliente, acorde con sus necesi­dades.
La clave del éxito de estos espa­cios empresariales reside en el apro­vechamiento de espacios y en la optimización de recursos, lo que se lo­gra al ser compartidos por varias compañías.
Por último, cabe señalar que los centros de negocios se caracterizan por incorporar las últimas tecnolo­gías y los sistemas de comunicación más avanzados, con el objeto de fa­cilitar lo máximo posible la tarea del emprendedor o de la entidad de que se trate.

Una solución en tiempos de crisis


En periodos de recesión económica, siempre hay actividades que salen beneficiadas y que ganan rentabilidad gracias al recorte presu­puestario de otras. Es el caso del sector de los centros de negocios, que actualmente cons­tituyen una atractiva alternativa para el desa­rrollo de la actividad profesional a bajo precio, a la vez que suponen una interesante opción para la inversión de las compañías inmobilia­rias y constructoras.
Pero, ¿qué son exactamente los centros de negocios y por qué suponen un ahorro de cos­tes? Se definen como espacios empresariales privados y compartidos por profesionales in­dependientes, emprendedores, delegaciones o empresas pequeñas, cuyo objetivo principal es aprovechar la puesta en común de algunos servicios. Están equipados con todos los com­ponentes físicos, tecnológicos y humanos que requiere el ejercicio profesional.
Es por ello que la situación económica del país, traducida en elevados precios de alquiler y compra de oficinas, está favoreciendo que muchas compañías opten por instalarse en los centros de negocios, que optimizan costes e in­fraestructuras en la realización de la actividad empresarial.
Por otra parte, los crecimientos sostenibles que registra el encarecimiento del suelo indus­trial y terciario, frente al de uso residencial, han conseguido que los centros de negocios centren la apuesta de muchas constructoras. La opción de invertir en un centro de estas ca­racterísticas contribuye no solo a obtener más rentabilidad por metro cuadrado sino a evitar la crisis del sector inmobiliario.
Además, la inversión adicional que requiere el equipamiento de estos espacios ofrece una rentabilidad perdurable en el tiempo

Más de 350 centros en España

Las circunstancias tan propicias que rodean el sector de los centros de negocios contribuyen a su relevante desarrollo y a que, a pesar de ser una actividad emergente y relativamente re­ciente en el mercado español, esté experimen­tando un importante auge.
El sector tiene un volumen de facturación en España cercano a los 65 millones de euros y genera más de 1.000 empleos directos. Hoy en día, existen 350 centros de negocios en el país, el .tercer estado europeo con mayor número de centros, que cuentan con 140.000 metros cuadrados de instalaciones tecnológicamente avanzadas, más de 5.000 despachos equipados y 700 sa­las de reunión.
Cerca de 20.000 clientes emprendedores, profesionales, empresarios individuales, pymes y multinacionales optan actualmente por los centros de negocios como alternativa a la oficina convencional por las ventajas que ofrecen.